El codo de tenista o epicondilitis es una inflamación del epicóndilo derecho.
El dolor es muy peculiar y se activa cuando se realiza un movimiento que implique fuerza o peso, se presenta adormecimiento en las manos, cuando lleva la palma hacia arriba, al jalar un objeto.
Los atletas no son las únicas personas que pueden padecer codo de tenista. Muchas personas con codo de tenista participan en actividades laborales o recreativas que requieren el uso repetitivo y vigoroso del músculo del antebrazo.
Los pintores, plomeros y carpinteros son especialmente propensos a desarrollar codo de tenista. Los estudios han demostrado que los trabajadores automotrices, cocineros e incluso carniceros padecen codo de tenista con mayor frecuencia que el resto de la población. Se cree que la repetición y levantamiento de peso necesarios en estas ocupaciones conlleva a las lesiones. Así como también una caída. Los músculos que se llegan afectar son los de antebrazo palmar mayor, supinador, sobre todo los músculos de de origen que flexionan y extienden el codo.
Tratamiento de Rehabilitación:
La duración del tratamiento depende de cada persona, tenemos que considerar si ha tenido lesiones anteriores o recientes. Cuánto tiempo lleva con su lesión, tratamientos anteriores recibidos.
También se toma en cuenta si es crónico o agudo, se inicia tratamiento de fisioterapia de 4 semanas a 6 semanas si no hay mejoría se remite a una cirugía.
Tiene dos vertientes el tratamiento de la epicondilitis preventivo y resolutivo.
En el tratamiento preventivo se le indica la hidratación en caso de deportistas pues al sudar los electrolitos se pierden y estos ayudan a que el músculo se contraiga o expanda.
También sobre higiene articular de miembro superior.
En un tratamiento resolutivo se requiere desinflamar y disminuir el dolor, mejorar los movimientos libres así como con resistencia. El uso de ultrasonido desinflamatorio y láser analgésico, también el vendaje neuromuscular conocido como tapping con la finalidad de desinflamar tendones.
Terapia física Los ejercicios específicos son útiles para fortalecer los músculos del antebrazo. Su terapeuta también puede realizar un ultrasonido, dar masajes con hielo o usar técnicas que estimulan los músculos para mejorar la cicatrización del músculo.
En TotalPhysio contamos con equipos de alta calidad, para ayudar a nuestros pacientes a recuperarse de sus lesiones y a reincorporarse a sus actividades en el menor tiempo posible.