El desgarro muscular es una lesión común que puede afectar a personas de todas las edades y niveles de actividad física. Esta lesión ocurre cuando las fibras musculares se estiran más allá de su capacidad, resultando en un desgarro parcial o completo del tejido muscular. Los desgarros musculares pueden deberse a diversos factores, como una carga excesiva, falta de calentamiento adecuado o movimientos bruscos.
La fisioterapia desempeña un papel crucial en la recuperación de los desgarros musculares, brindando una serie de beneficios para acelerar el proceso de curación y restaurar la función muscular óptima. Uno de los principales beneficios de la fisioterapia es la reducción de la inflamación mediante técnicas como la aplicación de hielo y la terapia manual. Esto contribuye a aliviar el dolor y a mejorar la movilidad en las primeras etapas de la recuperación.
Además, los fisioterapeutas diseñan programas de ejercicios específicos para fortalecer gradualmente el músculo afectado. Estos ejercicios buscan restaurar la flexibilidad, la fuerza y la resistencia muscular, permitiendo una recuperación completa y previniendo futuras lesiones. La terapia física también incluye técnicas de estiramiento y masajes que mejoran la circulación sanguínea, acelerando así la entrega de nutrientes esenciales a la zona afectada.
Otro aspecto crucial de la fisioterapia en casos de desgarro muscular es la educación del paciente sobre la biomecánica adecuada y la prevención de lesiones. Los fisioterapeutas proporcionan pautas personalizadas para el retorno seguro a la actividad física, evitando la recurrencia de desgarros musculares.
Existen 3 grados de desgarro:
- Grado 1 o leve: hay un estiramiento o rotura de una fibra muscular
Hay molestia ligera, tumefacción mínima pero no se ve afectado el movimiento.
- Grado 2 o moderado: Hay una rotura moderada de la fibra muscular y del tendón del mismo.
Hay dolor al tacto, presencia de tumefacción y se ve afectado el movimiento. Además de que la marcha también se ve afectada en caso de que el desgarro haya sido en los músculos del miembro inferior.
- Grado 3 o grave: Se presenta la rotura completa del vientre muscular
Al tacto se puede sentir un defecto notable en la fibra muscular, el dolor es más intenso y se dificulta la capacidad de movilidad y en caso de que sea miembro inferior el afectado, se dificulta la marcha
¿Cúal es el tratamiento?
- Se suministrarán medicamentos para el dolor y la inflamación.
- De manera inmediata a la lesión se tiene que aplicar RICE que es reposo, aplicación de hielo, compresión y elevación.
- Se debe de reposar de 3 días en adelante según la grado del desgarro, esto quiere decir que se suspende cualquier actividad física que le paciente practique.
- La aplicación del hielo debe ser inmediata después de la lesión de 15 a 20 minutos.
En resumen, la fisioterapia juega un papel vital en el proceso de recuperación de los desgarros musculares al reducir la inflamación, mejorar la movilidad, fortalecer el músculo afectado y educar al paciente sobre la prevención de futuras lesiones. La colaboración entre el paciente y el fisioterapeuta es fundamental para lograr una recuperación completa y una vuelta segura a la actividad física.
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Bibliografía:
1 Barbany, J. R. (2003). Fisiología del Ejercicio Físico y del Entrenamiento. Paidotribo Editorial.
2 Kraemer, W., Fleck, S., & Deschenes, M. (2012). Fisiología del Ejercicio. Lippincott Raven.
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